“Después de que al ex director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI) le retiraran el martes pasado todos los cargos por acoso sexual e intento de violación, el FMI anunció que Strauss-Khan visitaría la sede del organismo. Y así ha sido. Ayer acudió a Washington donde se reunió brevemente con su sucesora, Christine Lagarde, y se despidió de sus compañeros y ex empleados, algunos de los cuales le recibieron con aplausos.”
El Confidencial (30/08/2011)
Lo de leer las noticias y estar al día está bien; pero no debemos olvidar lo que los grandes titulares y los estruendosos aplausos están tapando:
Punto 1. Le han retirado los cargos de acoso y violación pero nadie ha dicho que NO LO SEA. Más bien que no lo han podido probar. ¡Y eso que ha tenido los abogados más caros!
Punto 2. ¿Y esos aplausos sus colegas del FMI? ¿ Estarán contentos que su amigo el no-probado violador esté en la calle? ¿o Estarán contentos de que este individuo ya no esté entre ellos?
Punto 3. ¿Qué se habrán dicho Strauss-Khan y su sucesora Lagarde? ¿Cómo estará el estómago de ésta última? ¿Le habrá mirado a los ojos?
Está claro. El FMI está por lo que está: el dinero de uno pocos (Llámese Francia, China, Berlusconi, o La Caixa). ¡Qué importan violaciones, muertos de hambre en Africa o que Movistar eche a un montón de gente aún ganando millones!